En ocasiones te puedes encontrar en la situación de tener que medir el caudal de un río y haber olvidado el caudalímetro. Hay varias maneras de solventar esta situación, aquí os vamos a exponer “el método del flotador”, que es útil cuando el caudal del río o arroyo es pequeño y el agua está tranquila.
Este método consiste en medir las velocidades superficiales en un tramo de un río donde el régimen sea laminar. Posteriormente se calcula la superficie transversal del río, y multiplicando el sumatorio de cada una de las velocidades y superficies, se calcula el caudal total. Recordando que:
Q = V *S
Para usar este método necesitaremos:
- Un objeto que flote.
- Unas estacas para aguantar las líneas paralelas.
- Unas líneas paralelas, pueden ser un par de cañas.
- Un metro o una vara para medir la profundidad.
- Un reloj con cronometro.
- Hoja de registro.
En primer lugar, se fijan dos líneas paralelas en un tramo rectilíneo del río que sean perpendiculares al flujo. La distancia entre las líneas debe ser de 1m o superior, cuanto mayor sea la distancia más precisa serán las mediciones de tiempo. La caña situada más arriba se divide en tramos equidistantes (en nuestro caso, 6 tramos de 50cm). Se coge un objeto que flote (un trozo de madera o un tapón de botella) y se lanza el flotador 10 veces desde cada uno de los puntos, y con un cronometro se toman los tiempos que tarda en recorrer la distancia entre las líneas paralelas. De esta forma y realizando una simple operación [v=s/t] se halla la velocidad superficial en cada tramo.
En segundo lugar, para el cálculo de la superficie transversal del río, se mide el ancho del río y el calado en cada uno de los puntos o marcas de la caña. Suponiendo un lecho del cauce bastante regular, se puede asemejar el cálculo del área del cauce al de un trapecio. En este caso, dividimos el cauce en 5 áreas y despreciamos los valores de los extremos cuya velocidad superficial del agua es muy próxima a 0.
Por último, para calcular el caudal de agua (en m3/s), se multiplica la velocidad media del agua (en m/s) por la superficie transversal del río (en m2).